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¿Quién dijo que el blanco era sólo para el altar?

Con el calorcito en puerta, seguramente ya habrás empezado a revolver tu guardarropa de verano y encontrado todos esos pantalones y polleras blancos que tanto te gusta usar pero que sabés que no son aptos para el invierno (salvo, claro está, que quieras que te confundan por una chica fácil, de esas que usan blanco en invierno).


El blanco es complicado. Con la decisión de ponerte un pantalón blanco surgen una serie de cuestionamientos que a veces hasta hacen que te plantees si realmente vale la pena usar ese color.


Pues no temas, podés usar el blanco sin miedo, eso sí, tené en cuenta algunos detalles que hacen a tu imagen pública:

- Sólo está permitido el uso del blanco de noviembre a marzo, no intentes prolongar el verano, eso no va a suceder por más que sigas usando soleros y ropa clara.

- Tu ropa interior tiene que ser, sin excepción alguna, de color piel, de otra manera se notaría lo que llevás puesto y sabés bien que sólo tu chico, tus mujeres de confianza (mamá, amigas, etc) y tu médico deben poder verte las panties.

- El modelo de tu ropa interior puede ser tanga (pero si y sólo si no se nota a través del pantalón), coulotte (mejor si es de los que no tienen costuras), o vedetina (la mejor opción ya que denota decencia y monogamia).

- Está terminantemente prohibido no usar ropa interior o llevar panties con dibujos, motivos o colores oscuros (en especial el negro).


Si querés que te respeten, empezá por respetarte vos: mostrá sólo lo que tenés que mostrar, el blanco puede ser maravilloso, pero hay que saber llevarlo bien.

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